martes, 31 de agosto de 2010

Algo más que el dulce de leche

Por Gabriela Manchini
Taller de Comprensión y Producción de Textos II
Año 2010



A días del bicentenario, es inevitable no ponernos a pensar cuales son los rasgos que nos identifican como argentinos.
Es cierto que en estas ocasiones es imposible no citar el mate, el dulce de leche, la birome u otra serie de elementos que nos distinguen, pero está claro que ellos no bastan para caracterizar al ser nacional.
Nuestra historia es el reflejo de las controversias, resistencias y la capacidad de adaptación que como argentinos hemos desarrollado ante las adversidades. A doscientos años de aquel primer gobierno patrio estas condiciones nos continúan caracterizando.
Identificados por ser una sociedad contestataria y cuestionadora, somos reconocidos en el mundo por la pasión de nuestros impulsos.
Sin lugar a dudas el fútbol es aquel deporte en donde pueden verse reflejadas las más variadas emociones: “Es el país de la pelota” reflejan algunos cantantes en sus canciones.
Esto no es todo. La música, sobre todo el tango o el folcklore, influyen en la formación de nuestro ser nacional. El cine, la literatura y el teatro son por otra parte espacios en donde puede verse reflejada nuestra esencia.
Pero volviendo a lo más profundo de nuestro ser, a aquellos hechos que día a día podemos observar. Hoy es común escuchar muchas críticas a nuestra sociedad: por momentos parecería que viviéramos en un territorio poblado de ladrones, asesinos y ‘malévolos personajes’, olvidándonos que somos una sociedad que se solidariza ante las adversidades, las necesidades ajenas o los padecimientos.
Sería importante valorarnos más como sociedad y por una vez dejar de considerar que todo lo bueno únicamente proviene de Europa o Estados Unidos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario